martes, marzo 28, 2006

Libro: Los amigos del "Dr." Schafer.







Autores: Claudio R Salinas y Hans Stange.
Editorial: Random House Mondadori.
Páginas: 238.
Año: Enero 2006.








Luces sobre Colonia Dignidad:

Esta obra nos introduce en el núcleo de la Sociedad Benefactora y Educacional Dignidad.
Así por lo menos constaba en el decreto de concesión de personalidad jurídica. Al avanzar en las páginas uno se da cuenta que fue algo totalmente distinto a lo señalado ya que en sus terrenos primó el autoritarismo y las aberraciones.
El origen de esta triste institución data de 1956 en Alemania donde se creó la "Misión Social Privada" que tenía por objeto ayudar a las personas que sufrieron en la segunda guerra mundial. Desde este país Schafer y sus secuaces se fugaron hacia un pequeño y cándido país llamado Chile.
¿Por qué escapó Schafer de Alemania? ¿Sólo para viajar? No. Por una acusación de abuso de menores.
Se funda en 1961 en Chile, Colonia Dignidad.
La excusa para instalarse por estos lares fue el terremoto de 1960 que afectó principalmente a Valdivia y sus alrededores. En el sur se instaló la Colonia. Sus fines , que transribiré textualmente de su acta de fundación, son: "... ayudar a niños y jóvenes huérfanos, desvalidos, proporcionarles un ambiente de hogar, sanas ideas de moral cristiana y corrección y enseñarles a labrar la tierra.. y otros trabajos para que los protegidos puedan incorporarse a la sociedad como miembros útiles..." Para lograr estos fines se creó un internado, una escuela y un hospital.
Esto es lo que formal y objetivamente, sólo en el papel, se dio a conocer al pueblo y a algunas autoridades chilenas. Lo que ocurrió fue diametralmente opuesto.
Lo que pasó fue que las personas que ingenuamente iban a dejar a sus hijos al internado para que los cuidaran y les dieran buena educación, terminaron secuestrados, dopados para que firmaran declaraciones en los que establecían que se encontraban en buenas manos y que no querían regresar con sus padres y por último, torturados, abusados y violados.
Lo que pasó fue que después del golpe esta institución sirvió para entrenar agentes de los servicios de inteligencia de las fuerzas armadas y además sirvió como centro de torturas.
Lo que pasó fue que las personas que libre y espontáneamente se asentaron en dicho lugar no podían tener hijos, contraer matrimonio y los que ya estaban casados se les separaba de sus parejas . Además no se podía interactuar con otras personas dentro de la Colonia y sólo se conversaba en la Asamblea presidida por el "Papá" Schafer.
Lo que pasó fue que se instaló una ideología en donde los malos - o chanchos como gustaba llamarlos Schafer- eran en un principio los comunistas, luego los allanamientos qe se practicaban en el lugar, los jueces por dictar órdenes de detención y aprehensión y por último nuestra vapuleada Justicia. Los buenos como se podrá intuir eran Paul Schafer (mirado como un Dios dentro de Colonia) y sus secuaces.
Entonces, uno se pregunta - como lo hacen los autores- ¿Por qué el enclave alemán sobrevivió a siete gobiernos desde el período del Presidente Alessandri Rodríguez hasta el período del Presidente Lagos Escobar? En este particualr e importante punto es donde el libro pierde precisión. Esto es porque no logra agrupar las diferentes situaciones acaecidas al rededor de la Colonia en una sóla hipótesis que establezca en concreto que pasó. Estas situaciones aisladas pueden verse como inocuas pero miradas como un conjunto pueden dar luces sobre lo que sucedió en Colonia y la impunidad que reinaba al interior de ella. Por dar un par de ejemplos, un hecho concreto es que la Ministra de Justicia del Régimen Militar del señor Pinochet , doña Mónica Madariaga, atendió a su madre en el hospital que la Colonia tenía dando así pie para que desde los mandos superiores no se hiciera nada. Otro hecho es que todos los funcionarios judiciales , de gobierno o congresales salían rebosantes de alegría y admirando la obra alemana agasajados hasta el cuello de kuchenes y pastelería varia. Es que como diría Schafer , "todos tienen su precio". Regalos, donaciones, prestación de servicio, eran las maneras como esta verdadera mafia se ganaba adeptos.
Más preguntas entonces van brotando. ¿Cómo es que una Sociedad Benefactora tiene todo su terreno electrificado, con alambres de púas, sensores, perros guardianes, torres de vigilancia y un dispositivo que permitía rastrear a una persona a dos km de distancia con el sólo pretexto de la temida "amenaza comunista"?. ¿No parece eso una pequeña fortaleza?. ¿No es raro también que tantas personas escaparon y que al prestar declaración se desetimaban sus acusaciones por considerarseles dementes previo informe elaborado por una Dra de Colonia que ni siquera tenía título para ejercer? ¿ No es raro que antes de que una institución benefactora se instale no se haya verificado el prontuario de sus integrantes?. Bien raro todo.
Todo se puede resumir en una única pregunta : ¿Cómo puede ser que por cuarenta años haya funcionado un estado dentro de otro estado como señalan los autores? Ellos no responden de una manera concreta esta pregunta pero si dan algunas pistas.
Al parecer en Chile las instituciones no funcionan bien u otros hacen la vista gorda.

domingo, marzo 26, 2006

Deep Purple: Los dinosaurios aún existen.


Ayer fui a un concierto importante con mi amigo Marcelo. De esos que pocas veces se presencian. Ya al llegar a la Pista Atlética se podía percibir ese "no se qué" que tienen las bandas clásicas. Ese perfume que atrae tanto a niños aferrados a los hombres de sus padres, adolescentes , treintones, cuarentones, cincuentones y uno que otro sesentón hippie de la vieja escuela. A las 19:00 hrs. llegué y el público ya estaba entusiasmado coreando viejos temas de Motorhead, Metallica , Ac Dc y otros que sonaban por un parlante. Desde ese momento también se intuía que los chicos de De Saloon no la iban a tener fácil. Y no la tuvieron. Se les gritó de todo , se les tiró de todo y el único aplauso que sacaron fue cuando se bajaron del escenario después de 15 minutos de fama, algo así como 4 canciones. Es que la gente fue a ver otra cosa. Luego de una espera algo interminable, a las 21:00 hrs sale Deep Purple. Si con las primeras canciones el público se extasió , con los temas clásicos eso fue una alegre y enfervorizada bacanal.
Ahi relucieron como joyas perdidas "Lazy" (que duró algo así como 5 minutos, sin la esperada introducción de guitarras y órganos), "Highway Star", "Smoke on the Water", "Space truckin", "Black Night" y algunas del nuevo disco como "Wrong man" y "Rapture of the Deep" canción, esta última, que le da nombre al disco.
Se dijo que Ian Gillan no cantaba como antes... falso, su desgarrada voz se impuso y su energía jamás se durmió. Se dijo que Steve Morse (guitarrista que viene a reemplazar al mítico Ritchie Blackmore) no cumplía su trabajo.. falso y vaya que la cumplió, incluso, nos dedicó algo de Led Zeppelin. Se decía que no es lo mismo Deep Purple sin John Lord en los teclados... falso. Don Airey hizo gala de su vasta experciencia musical y en su solo de órgano nos deslumbró con piezas clásicas, algo de los Beatles y la Guerra de las Galaxias.
¿Podría haber estado mejor esto? Si claro. Si nos remontamos a sus presentaciones por allá por los setenta claro que eran mejores , mejor voz, solos interminables, etc. Pero eso era imposible para algunos de nosotros que nos conformamos con la energía derrochada y la empatía y carisma que exhuman estos dinosaurios del Hard Rock. Larga vida a Deep Purple (si es que eso es posible atendida las edades).

jueves, marzo 23, 2006

Teatro. Obra: Gemelos.


Obra: Gemelos
Compañía: La Obra (ex La Troppa)
Actores: Laura Pizarro, Diego Fontecilla y Juan Carlos Zagal
Duración: Dos horas app.




El Sábado que pasó fui a ver esta aclamada obra de la compañía "La Obra".
Esta composición artística data de 1995 y es una adptación libre de la novela "El gran cuaderno" de Agata Kristof. Cuenta la historia de gemelos que se ven obligados en plena segunda guerra a vivir con su abuela (a la cual no conocen) ya que su madre cae en situación económica precaria y su padre se va a batallar al frente de combate. Ese es el argumento formal del cual está revestida la obra. Ahora bien en cuanto al contenido vemos un desarrollo de estos pequeños desde una ingenuidad pura, manejados por la candidez de sus cortos años, pasando luego al mundo adulto siempre acompañados de esa aura propia de su edad, esto es, analizando cada situación que se les plantea desde su tan íntima perspectiva no relacionando lo bueno en contraposición a lo malo sino buscando formas eclécticas de comprensión del medio que los rodea. Así es como cuando se les presenta un cura que abusa de una de sus amigas del pueblo ellos comprenden que esa actitud es mala, aberrante, pero la mejoran de una manera poco correcta, esto es sobornando al cura para que este les pase un dinero con lo cual podrán ayudar a un buen fin. O sea, se van adaptando al medio.

Este montaje en lo que dura muestra la vida misma.
Esots chicos atraviesan por diferentes esadios en donde se encuentran con problemáticas propias de la edad y frecuentes en la vida de todos.
Ellos emplean ciertos mecanismos de defensa contra la sociedad o mejor aún, para fortalecerse ellos mismos, llamados ejercicios de endurecimiento que no son más que las estructuras que nos planteamos y creamos ante diversas circunstancias que hacen que uno repita una determinada decisión frente a un mismo problema. Así vemos ejercicios de endurecimiento del cuerpo (ante la falta de comida para aguantar mejor el hambre) y del espíritu (ante epítetos que las personas les profieren en la calle).

En síntesis, esta obra tiene todo para ser un buen espectáculo teatral desde los actores (los cuales rinden una espectacular muestra de su variopinta manera de trabajar encarnando a diversos personajes, incluso, cantando y moviéndose como magistrales marionetas) , la escenografía (simplemente increíble, de lectura cinematográfica de calidad) y por último el argumento, el cual, simplón, clásico, nos trae de vuelta a nuestra primeras épocas, las de niñez, en donde el mundo suele ser una cosa distinta a la que nos acostumbramos cuando crecemos.